En un tiempo próximo en el que las grandes corporaciones emprenden proyectos de minería espacial, Marcos es seleccionado para hacerse cargo del mantenimiento de la maquinaria en una expedición que durará diez años.Se trata de doscientos robots que disponen de ordenadores independientes e interconectados. Emplean un sistema operativo -Sinapsis Entrópica- que replica el funcionamiento de cerebro humano. Cada robot desarrollará durante esos diez años su propia inteligencia de manera similar a como lo hacen los humanos, y eso incluye también el desarrollo de personalidad y rasgos propios de la naturaleza humana a pesar de que no se desarrolle sobre neuronas, sino sobre circuitos y procesadores de silicio.La inteligencia y las habilidades de Marcos apenas cambiarán durante esos diez años, mientras que las de los doscientos robots siguen aumentando su inteligencia y desarrolla su propia personalidad.Según va evolucionando la expedición, las tormentas solares y el hecho de que los organizadores de la expedición no relevasen a Marcos toda la información que después va descubriendo, hacen que su relación con las máquinas siga un equilibrio ente los intereses comunes con ellas y los de las propias máquinas. El retorno a la Tierra llega a ser solamente uno más de los desenlaces posibles.